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viernes, 2 de febrero de 2018

John Waters




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¿La liamos…?



John Waters es un icono de la cultura popular, excelente y curioso director de cine, actor, guionista y singular escritor.

       La editorial Anagrama inaugura una colección, “Contraseñas Ilustradas” y nos invita a Cómo liarla (2017), un discurso tan subversivo como hilarante que Waters pronunció ante los licenciados de la Escuela de Diseño de Rhode Island invitándolos, puesto que serían futuros creativos, expresamente, ¡A liarla!

       Waters afirma que cualquiera que emprenda el camino creativo deberá tener en cuenta que el pragmatismo y la disciplina son tan importantes como el talento, y nunca deberá temer el fracaso, les insta a estar atentos a cualquier eventualidad, incluidas toda la serie de impertinencias que les permita la sociedad. Los textos breves, y contundentes, están ilustrados por Eric Hanson y Waters se permite decir a los jóvenes cómo él mismo, “se supone debe servirles de inspiración y se pregunta ¿cómo es eso? Su respuesta clara y decisiva: “De algún modo he conseguido ganarme la vida durante cincuenta años haciendo lo que más me gusta sin tener jamás un trabajo de verdad”. Y con respecto al arte visual, les recomienda observar las exposiciones de galerías que compiten, ver las películas que tienen críticas negativas, para así imaginar qué hizo mal el director, y por supuesto, ¡Leed, leed, leed! Deben convertirse en espías y ser auténticos cotillas que escuchan a escondidas. Añade  a su discurso, aun lo mejor: “Hoy podría ser el final de vuestra delincuencia juvenil, pero también debería ser el primer día de vuestra nueva desobediencia adulta”, y las consignas y/o consejos finales: DISEÑAD, HORRORIZADNOS, ESCANDALIZAD, UTILIZAD LA TECNOLOGÍA, y finalmente, DAD GRACIAS POR LO QUE TENÉIS.  
       Ahora os toca li ar la.

El autor
       Apodado por el escritor de la generación beat William Burroughs “El Papa del Trash” John Waters, que nació el 22 de abril de 1946 en Baltimore, Mayland (Estados Unidos) se convirtió en un director de culto en los años 70 gracias a sus comedias inmundas, groseras, satíricas e irreverentes. Con títulos como “Pink Flamingos”, “Polyester” o “Hairspray” es un referente básico del cine undergound más sucio, fresco, desvergonzado y camp, o como llegó a afirmar Susan Sontag, “el mejor ejemplo de la expresión artística conscientemente artificiosa, estrafalaria, divertida y exagerada”.
Después de trabajar como marionetista para niños Waters grabó en el instituto sus primeras películas. Allí, junto a un puñado de amigos, creó un grupo al que denominó The Dreamland Players y con una cámara de 8 mm comenzó a rodar historias que intentaban subvertir los valores del ciudadano medio estadounidense. Había ingresado en la Universidad de Nueva York pero duraría más bien poco, un día lo pillaron fumando marihuana y al siguiente ya estaba de patitas en la calle con una carta en la que sus profesores le recomendaban a sus padres que su hijo necesitaba acudir a un psiquiatra.
Waters rodaría en los años 70 títulos como “Multiple Maniacs” (1970), “Pink Flamingos” (1972), uno de sus títulos más populares, “Cosa de hembras” (1974) y “Desperate Living” (1977). Con “Polyester” (1981), comedia satírica, y “Hairspray” (1988), posteriormente convertida en musical de Broadway, alcanzaría otros éxitos.
Su cine se ha atemperado más con el paso de los años y ha ofrecido títulos de enfoque más comercial como “Los Asesinatos de Mamá” (1994) y “Pecker” (1998). Su última película es “Los Sexoadictos” (2004), una comedia sexual.





John Waters, Cómo liarla; Barcelona, Anagrama, 2017; 
“Contraseñas ilustrada”.

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